Es prácticamente imposible ir a Girona y no ir a visitar su catedral, es el reclamo turístico por excelencia de la ciudad y uno de los edificios más filmados en los últimos años por grandes cineastas. En sus escaleras se rodaron escenas de la mítica serie Juego de Tronos donde se mostraban unas majestuosas vistas hacia el mar…después de aquello más de uno se ha llevado un chasco, y es que la Catedral de Girona se levanta sobre el corazón del Barri Vell, en medio de una plaza des de la qual se admirar toda su grandeza., y obviamente, Girona no está rodeada de mar.
Muchos se han atrevido a afirmar que probablemente sea uno de los símbolos más reconocidos y visitados de todo el territorio. Este edificio religioso es una muestra más de que la ciudad sigue respirando historia, construida entre los siglos XI y XVIII, se configura a partir de un conjunto de muros y espacios de estilos diferentes, desde el románico (claustro y torre de Carlomagno) hasta el Barroco de la fachada y la escalinata. Su elemento más singular es la gran nave (s. XV-XVI), que constituye el espacio gótico abovedado más ancho del mundo (23 metros).
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